COMPRAR VÁLVULA ICF

El mejor precio para comprar Válvulas multifunción ICF

Las estaciones de válvulas son componentes infaltables en todos los sistemas de equipos de refrigeración o calefacción. En especial, las llamadas válvulas ICF son las adecuadas para todos los refrigerantes más comunes y tanto de alta como de baja presión.

Estas válvulas se usan para las líneas de líquido, así como para los circuitos de inyección de compresores y también en todo el sistema de tuberías o fontanería de gas caliente.

Las estaciones ICF están homologadas para presiones que no superen los 52 bares o su equivalente 754 psi o libras por pulgada cuadrada y pueden utilizarse en la gran mayoría de tipos de refrigerantes, sean estos gases o líquidos.

Las estaciones de válvulas ICF hechas de Flexline (compuesto de plástico) proporcionan total maniobrabilidad y libertad a los técnicos a la hora de instalar sistemas de refrigeración.

Esto se debe a que el diseño de estas válvulas está basado en un concepto muy exclusivo de tipo modular.

Esta es una de las mejores soluciones de control que brinda múltiples conexiones y que las empresas de tecnologías para uso industrial ofrecen al mercado para un ahorro importante de componentes porque hace posible permite sustituir varias válvulas por una única.

De allí que se le denomine “estación de válvulas”. En otras palabras, cumple varias funciones. Está compuesta por una carcasa y entre dos y seis módulos distintos de función.

Este diseño único lo hace un mecanismo muy cómodo de solución de modalidad plug and play. En otras palabras: conectar y usar.

Asimismo, las válvulas o estación de válvulas ICF son compatibles con el 90 % de todas las aplicaciones existentes. Para ello se usan solamente cuatro configuraciones básicas y admite más de 60 configuraciones que pueden personalizarse.

¿Qué significa esto? Para los técnicos facilidad de reparación e instalación. Para los usuarios, rapidez, servicios más baratos y disminución de las horas de mantenimiento.

Dónde comprar válvulas ICF

Las válvulas ICF pueden comprarse en ferreterías, venta de accesorios e insumos para equipos de climatización, tiendas para aires acondicionados, suministros industriales y tiendas afines a este sector.

Lo importante es que sean hechas con Flexline que representa la más reciente innovación en válvulas para equipos de refrigeración y calefacción, ya que es una pieza de fácil instalación, puede admitir diversas configuraciones funcionales.

Esto la convierte en la mejor alternativa en sistemas de climatización de alta presión.

A pesar de estar delineada con una planeación sencilla y modular que facilita el diseño de los circuitos de refrigeración (y en algunos casos calefacción) y contribuye a reducir de manera notable el tiempo de revisión y diagnóstico de equipos por mantenimiento o fallas.

Al mismo tiempo, reduce el consumo energético y los requerimientos de espacio, ambos factores que permiten que los sistemas sean más económicos en lo que a su operación respecta y a que tengan un menor impacto medioambiental o ecológico.

Posee además estas peculiaridades:
Reduce tiempos de mantenimiento, revisión y reparación
Consume mucha menos energía y el impacto negativo para el medio ambiente es, sustancialmente, menor
Admite refrigerantes (líquidos o gases) de alta y baja presión.

Precios de las válvulas ICF

Obviamente, el precio de las válvulas ICF varía en función del tamaño de la misma, el equipo, marca y modelo y la presión que debe soportar. El abanico es amplio y abarca desde las más sencillas de usos doméstico, en unos 9-11 euros, y las de uso industrial, que pueden costar un par de cientos de euros.

Para comprar una válvula o estación de válvula ICF hay que estar pendiente de sus características. Lo más recomendable es llamar a un técnico especializado en el equipo que tenga la válvula y este dirá qué modelo y tamaño (o la marca) de este componente.

Sin embargo, todas las válvulas ICF son más pequeñas y flexibles que otros modelos de válvulas que pueden ser sustituidas por esta.

Asimismo, vienen disponibles con conexiones que están fuertemente soldadas para DIN 15 y para DIN 20. También incorpora en su diseño integral una válvula para el cierre y un filtro que impide el paso de impurezas por todo el circuito.

Una válvula ICF, cuenta, igualmente, con dos puertos unidos que hacen posible seis tipos de configuraciones distintas. Es decir, combina válvulas motorizadas, solenoides o electrónicas, todo en un mismo componente. Por eso su precio suele ser menor que otras refacciones de sistemas de climatización

Al tener dimensiones más compactas, acelera, del mismo modo, la instalación, hace más fácil la revisión y contribuye a reducir los costes de mantenimiento y de funcionamiento.

Características de las válvulas ICF

Como ya se dijo, las válvulas o estaciones de válvulas ICF son capaces de trabajar con líquidos o gases refrigerantes de baja o alta presión. Esto hace posible su uso en líneas de líquidos, inyección en todo tipo compresores y por los sistemas en los cuales circula gas caliente que no excedan la presión de 52 bares.

Estas características la hacen la válvula de elección por excelencia de equipos de climatización que usen CO₂ o dióxido de carbono, pero también para los que trabajan con NH3 o amoniaco.

También es compatible con los refrigerantes HFC o gases fluorados y refrigerantes HCFC o hidroclorofluorocarburos. Esto las hace perfectas para proyectos de refrigeración que deban proporcionar eficiencia por largos períodos de tiempo como las cavas de restaurantes, hoteles o refrigeradores caseros.

El funcionamiento de los equipos de refrigeración con amoniaco o refrigerantes HFC o HCFC poseen un compresor que prensa el refrigerante (gas o líquido) hasta la temperatura de condensación. Para esto el líquido fluye por el sistema y el gas seco se transforma en líquido y lo envía al sistema de ventiladores para enfriar.

En todo este proceso, las válvulas ICF sirven de controladoras para que el sistema se mantenga estable y funcione correctamente sin fugas o explosiones.

Esto sucede porque están diseñadas para compartir las piezas de repuesto o refacción con el resto componentes. De allí la importancia de que estén fabricadas de material maleable conocido como Flexline.

Además, al ser varias válvulas en una, disminuyen los costes porque una sola pieza sustituye a varias.